Terapia de Reposición Hormonal

Climaterio, Menopausia y Posmenopausia

El climaterio es un periodo de transición que se prolonga durante años, antes y después de la menopausia, como consecuencia del agotamiento ovárico, asociados a una disminución en la producción de estrógenos [1].

Durante este proceso que da paso a la menopausia, la que se detecta en el momento en que ocurre la última menstruación, ya que marca un hito importante en la vida fértil de la mujer. Con ella se produce un deterioro en la calidad de vida de las mujeres e incrementa el riesgo de padecer alguna enfermedad crónica, por lo que los estilos de vida sanos y la terapia hormonal de la menopausia (THM) son, consideradas como las principales intervenciones para contrarrestar los efectos del climaterio [2].

Es frecuente presenciar los primeros síntomas entre los 35 y 55 años de edad, siendo los 50 la edad promedio. Si aparece antes de los 40 se considera como menopausia prematura o precoz, en cambio, si ocurre pasado los 52 años es considerada tardía. Sin embargo, siempre será un médico profesional quien determine el diagnóstico [3].

El síndrome climatérico [4] incluye todos los síntomas que se puedan presentar en la premenopausia, menopausia y posmenopausia, caracterizado por alteraciones somáticas, psicológicas y genitourinarias, destacando:

• Bochornos
• Sudores nocturnos
• Alteraciones del ánimo
• Resequedad vaginal
• Disminución del deseo sexual
• Aumento del riesgo cardiovascular
• Aumento riesgo de osteoporosis

Estos síntomas pueden afectar a tu salud a corto y largo plazo, así como tu calidad de vida, la recomendación es siempre consultar con un especialista y llevar un estilo de vida saludable y equilibrado.

Terapia de Reposición Hormonal (TRH)

Debido a las repercusiones que genera en el cuerpo de las mujeres el síndrome del climaterio, es fundamental la asistencia de profesionales de la salud para abordar de forma multidisciplinaria sus factores y efectos que se van presentando conforme avanza, pues, son quienes pueden implementar correctas estrategias de promoción y prevención para mejorar tu estilo de vida, proyectando un envejecimiento saludable [5].

La terapia de reposición hormonal en la menopausia constituye una forma de restitución hormonal que tiene como objetivo aminorar los síntomas menopáusicos, disminuir el riesgo de enfermedades asociadas y mejorar la calidad de vida de la mujer que se enfrenta a este periodo [6].

Se entiende que, durante la menopausia, los ovarios dejan de producir estrógeno. Por lo que, la terapia de reposición hormonal contiene pequeñas cantidades de esta hormona femenina que cubren algunas de sus funciones y disminuyen las molestias.

Por tanto, se presenta como el tratamiento más eficaz, ya que disminuye en un 80% la frecuencia y gravedad de los sofocos. Dado que, las mujeres posmenopáusicas tratadas con esta terapia, indicaron sentir en menor medida síntomas de depresión, hostilidad y agresividad. Además de sentir mejoras en la lubricación, los orgasmos y presentaron en mayor medida sensaciones satisfactorias [7].

Esta terapia de reemplazo, no solo alivia los síntomas vasomotores, sino que también reduce significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares y de fracturas osteoporóticas [8]. A pesar de estos beneficios, los riesgos de esta terapia deben ser establecidos y evaluados por un especialista [9].

Nuevos datos revelan que el momento de la iniciación de la terapia hormonal en relación con la proximidad a la menopausia, es muy importante, porque entre más pronto se inicie el tratamiento hormonal después de la menopausia, parece tener un mayor impacto en la salud a largo plazo.

Esta terapia se encuentra indicada para mujeres sintomáticas menores de 60 años, o dentro de 10 años desde la menopausia, sin que presenten contraindicaciones. Cada mujer tendrá una dosis, previamente prescrita según cada caso e indicación médica, pudiéndose recomendar reducir las dosis con el aumento de la edad o cambiar vía de administración, pero solo un especialista lo puede determinar [10].

¿Posee efectos secundarios?

Al igual que todos los medicamentos, la terapia de reemplazo hormonal tiene riesgos. No obstante, los beneficios de los estrógenos en general son mayores, por lo que la THM se utiliza con frecuencia en todo el mundo. A pesar de los múltiples beneficios del tratamiento, no todas las mujeres deben tomarlo de manera indiscriminada

Algunos de los efectos secundarios de esta medida terapéutica son: molestias mamarias, sensación de hinchazón abdominal y sangrados ginecológicos, entre otros [11]. Los sangrados uterinos anormales son frecuentes en los primeros meses de tratamiento y pueden inducir un aumento injustificado en procedimientos diagnósticos (ej: histeroscopias, biopsias). Las dosis de estrógeno se correlacionan con la sensación de náuseas, distensión abdominal, dolor pélvico, edema, aumento del peso corporal. Con la administración de progestinas se pueden producir cuadros de cefalea, irritabilidad, depresión, síndrome premenstrual / desorden disfórico premenstrual [12].

Consideraciones de la terapia de reposición hormonal

Antes de iniciar cualquier terapia hormonal, debes conocer y evaluar la presencia de contraindicaciones. Por ejemplo, los estrógenos utilizados sin progesterona asociada, generan un aumento del riesgo de padecer cáncer de endometrio; sin embargo, las progestinas neutralizaron este riesgo [13].

También, existe una probabilidad de desarrollar trombosis con la terapia hormonal vía oral debido a los efectos proinflamatorios y procoagulantes relacionados al paso hepático. Por tal motivo, se recomienda en mujeres con obesidad (IMC >30), hipertensión arterial (HTA) crónica, diabetes mellitus, hipertrigliceridemia o antecedentes de enfermedad tromboembólica una terapia transdérmica [14].

La terapia de reemplazo hormonal está contraindicada en mujeres que han tenido cáncer de mama y en los casos en que existan lesiones de alto riesgo para un futuro cáncer de mama, como hiperplasia con atipia, carcinoma in situ, mutaciones BRCA-1, BRCA-2 o antecedentes familiares significativos [15], Debido a esto, es que su médico debe previamente realizar un seguimiento de su salud y antecedentes.

Por lo que es importante que, las mujeres que están siendo tratadas con la Terapia Hormonal de la menopausia, se controlen cada dos meses con profesionales, y una vez controlados los síntomas, lo hagan mínimo una vez al año. Además, para aquellas que no requirieron terapia de reposición hormonal o no presenten síntomas, se controlen una vez al año, a fin de evitar padecer síntomas propios del climaterio [16].

Bajo este contexto, es que te recomendamos siempre visitar a un profesional de salud, quien te guiará en este recorrido, ya que, será el encargado de velar por los requerimientos que tu cuerpo necesite. Indicando el mejor tratamiento según tus necesidades, síntomas y será quien determine la etapa del climaterio en la que te encuentres para entregarte un tratamiento acorde a tu salud.